La sinergia es un aspecto muy importante de lograr en cualquier organización. Ya sea de forma presencial o virtual, alcanzarla implica un gran esfuerzo por parte de la gerencia.
Ante la inminente necesidad de trabajar a distancia, para muchos de ellos puede resultar una verdadera proeza alcanzar este objetivo. Incluso, al tener que asimilar muchos cambios en simultáneo, liderar equipos de trabajo a distancia puede resultar aterrador.
Aun así, no hay que dejarse intimidar. Aunque esta tarea sí requiere de ciertas destrezas, es una meta completamente alcanzable. Contar con equipos de trabajo remotos que sean sinérgicos y productivos es posible. Aquí te decimos cómo lograrlo.
¿Qué es la sinergia?
Se puede definir la sinergia en las empresas como una acción creadora que se lleva a cabo de forma colectiva. Dicha acción va más allá de la simple colaboración entre las personas que integran los distintos departamentos de una empresa.
Consiste en la sincronización de capacidades, personalidades y objetivos para poder alcanzar resultados que generen un beneficio común.
Todos los involucrados cobran fuerza en esta unión. Se debe a que las relaciones entre sí permiten la comunicación continua y multidireccional. Asimismo, el intercambio de energía e información hace que la suma de las partes sea más valiosa que cada una por separado.
Que exista sinergia en la dinámica organizacional es el resultado de un proceso continuo. La razón es que las personas y las situaciones no son estáticas; por el contrario, cambian constantemente.
¿Por qué es importante promover la sinergia empresarial?
La sinergia no es otra cosa que trabajar en equipo. Esto les permite a las empresas lograr mejores resultados que los que se pudieran obtener por medio de la labor individual de cada colaborador.
Desde el punto de vista organizacional, la introducción de este concepto ha tenido un gran impacto. Se debe a los beneficios que tiene sobre la eficiencia y la mejora de la comunicación entre el personal de las empresas, al hacerla más asertiva.
En medio del contexto empresarial que plantea la sinergia, ha sido necesario establecer nuevamente el rol que desempeñan los líderes. Esto, como promotores de la visión de equipo y la unidad, como medios para alcanzar las metas.
Igualmente, en lo que respecta a las relaciones de cooperación y la sincronización de las distintas etapas del proceso productivo.
La importancia de lograr una excelente sinergia empresarial está en que, gracias a ella, las probabilidades de mejora, desarrollo y crecimiento se incrementan. De esta forma, las compañías pueden ser mucho más competitivas desde el punto de vista comercial.
En PMK capacitamos a los colaboradores de nuestros clientes con métodos y herramientas que promueven el trabajo colectivo. Empleamos modelos de aprendizaje que ayudan a cohesionar los equipos, mejorando la sinergia en la empresa.
¿Cómo se puede crear la sinergia laboral en los equipos remotos?
Ante la ineludible necesidad de recurrir, en menor o mayor medida, al trabajo remoto, se torna fundamental fomentar ciertas acciones. La meta será que logres consolidar equipos de trabajo que sean sinérgicos y, por ende, productivos, aun en la distancia.
Veamos cómo puedes lograrlo:
Aplica el smart working
Para que el equipo de trabajo pueda trabajar de la mejor manera desde cualquier lugar, la empresa debe velar porque sus colaboradores cuenten con equipos y herramientas tecnológicas de excelente calidad.
De esta forma, se podrá optimizar la dinámica del teletrabajo diario, porque se podrá acceder fácilmente a los datos y se podrán planificar y controlar las tareas.
Transmite la política de la empresa de forma clara
Para ello, puedes hacer uso de documentos sencillos, digitales incluso, como e-mails, podcasts o videos cortos de tipo informativo, para recalcar los valores y políticas de la empresa.
Recuerda que el ambiente organizacional va más allá del ámbito físico. También incluye un componente psicológico y hasta emocional, que es el que le corresponde a los líderes fomentar y cuidar.
Reúnete periódicamente con tu equipo
Apóyate en salas virtuales de reuniones para conversar persona a persona con tu equipo de trabajo. La finalidad es ir monitoreando continuamente el flujo de trabajo y los posibles contratiempos que puedan surgir, para recompensar los aciertos y corregir los errores.
Todo ello, para que pueda hacerse permanentemente y evitar retrasos o problemas que puedan perjudicar la productividad. Asimismo, es importante la comunicación con cada uno de los colaboradores.
Aprovecha las reuniones para saber si todo está bien en casa, cómo se sienten trabajando a distancia y otros temas personales. Transmite confianza y acompaña a tu equipo para hacerlos sentir en calma en medio de la incertidumbre de la situación.
Conoce bien a tus colaboradores
Es elemental que entiendas a tu equipo de trabajo y para eso, debes saber muy bien cómo está conformado. Si lo integran principalmente personas jóvenes o de edad mediana. Si son diestras o no con el uso de la tecnología, etc.
Esto te permite establecer las fortalezas y debilidades de tu equipo. De esta forma, podrás organizar mejor el trabajo y sacar el máximo provecho de las cualidades y habilidades de cada uno de ellos.
Organiza el trabajo
Es clave tener un plan de acción y determinar qué función tiene cada uno. Para lograr que se cumpla: establece y evalúa metas diarias, semanales y mensuales. Si es posible, apóyate en alguna herramienta digital que permita a todos llevar un control del flujo de trabajo.
Es importante establecer horarios específicos de trabajo que todos deben respetar, con la finalidad de no interferir o perturbar la vida hogareña.
Enfócate en la productividad
La mejor forma de hacer esto es colocar la mirada en los resultados. El trabajo remoto dificulta el micromanagement, ya que no es posible supervisar directamente al personal. Por lo tanto, hay que cambiar la perspectiva y orientarse hacia la gestión de resultados.
Lo relevante es flexibilizar la dinámica de trabajo y lograr llegar a la meta trazada, tanto individualmente como de forma grupal. Todo ello, con la libertad de que cada uno establezca su propio ritmo de trabajo, de acuerdo a sus condiciones particulares.
La integración del equipo y la confianza como base fundamental de la sinergia
En estos tiempos de crisis es el momento de crear o consolidar una cultura organizacional basada en la confianza, orientada al logro y enfocada en la autogestión. En este punto, tanto trabajadores como gerentes deben esforzarse por ser confiables.
Sin embargo, es necesario tener en cuenta que la confianza no es automática, más bien, hay que cultivarla. Esto se logra haciendo lo necesario para que los demás confíen en nosotros. Los valores como la responsabilidad y la honestidad contribuyen a ello.
Por el contrario, una persona negativa, reactiva, sin carácter e incompetente no inspirará confianza en absoluto.
Por otra parte, para lograr relaciones laborales de confianza también es importante establecer acuerdos claros. Convenios que generen compromiso entre sus involucrados. En ellos se debe determinar lo que se espera de cada uno y también lo que están dispuestos a dar.
Pero no es suficiente solamente establecer acuerdos claros, también hay que cumplirlos. En la medida que los miembros del equipo convengan y cumplan lo acordado, se incrementa la confianza y crece la sinergia.
De este modo, todos los miembros del equipo saben cuál es su función y la de los demás, la cumplen, y el flujo de trabajo se desarrolla con agilidad. Por lo tanto, se logran los objetivos trazados y se mantiene la productividad.
Mensajes claves
Crear sinergia en el trabajo virtual es posible. Lo más difícil para lograrlo es romper con los paradigmas propios del trabajo presencial, que era el más difundido y practicado hasta el momento.
Esto es parte de los cambios que debemos afrontar como consecuencia del impacto que ha tenido el covid-19 en el mundo. Gerentes y trabajadores debemos procurar abrazar los cambios con la menor resistencia.
La buena comunicación, el enfoque en los resultados y la confianza es lo que permitirá lograr la sinergia en el trabajo virtual y, con ella, fomentar y mantener la productividad y la competitividad de la organización.
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